Antes "indignados", ahora "concienciados".

Este es un blog para estar informado, para analizar, para discernir, para comprender, par ver más allá de lo evidente, para tomar conciencia de cómo funciona la sociedad, quién la dirige, y cual es nuestro papel, lo cual nos permitirá avanzar en el camino hacia un mundo nuevo. Sin consignas, sin apasionamientos, sin indignación; con criterio, con sentido común, con firmeza, con honestidad.

jueves, 6 de noviembre de 2014

¿Por qué soy "antisistema"? - Iª parte

Por coherencia interna con mis valores, por puro imperativo moral, por seguir los mandados de mi corazón, por utópicamente no renunciar a un mundo más justo, donde se repartan más equilibradamente la riqueza, la alegría y los recursos, por amor.

 La maquinaria ideológica y mediática de las élites se ha encargado, sistemáticamente y con un gran descaro pseudointelectual, de dotar a la palabra “antisistema” de un contenido y un significado execrable, malévolo y personalmente descalificador. Para eso les pagan. Estás conmigo o contra mí, dice el postulado fascista del miedo: Eres sistema o antisistema, me reta y amenaza constantemente el bienpensantismo ideológico reinante, los ingenieros sociales de la desmovilización y los creadores de la opinión políticamente correcta; y a veces me hacen dudar, de verdad que me confunden, pero cuando leo cosas tales como el informe “Gobernar para las élites. Secuestro democrático y desigualdad económica” publicado para 2014 por una organización tan poco sospechosas de antisistemica como Intermón Oxfam, sobre el avance de la desigualdad en el mundo y del secuestro de las sociedades democráticas, se disipan mis dudas más persistentes y reaccionarias como por encanto y, desde la tribuna de la heterodoxia, no me cabe otra elección que gritar y gritarme a mí mismo: Sí, soy antisistema.

No puedo, no ya defender o apoyar un sistema de extracción sistemática y cruel de la riqueza del planeta en favor de unos pocos, como se me indica que es lo correcto, sino que ni siquiera puedo condescender con él, concederle el beneficio de la duda, mirar para otro lado o no beligerar activamente. ¿Por qué no puedo? Por coherencia interna con mis valores, por puro imperativo moral, por seguir los mandados de mi corazón, por no renunciar a la utopía de un mundo más justo, por, simplemente, amor. 

A quién tenga programado algún rato para no mirar para otro lado, le recomiendo vivamente que se descargue y lea el informe mencionado. No tiene desperdicio. Ha pasado de puntillas por los medios la semana pasada, como no podía ser de otra manera, y, de momento, puedes descargártelo de la página web de Intermón Oxfam en:
 

Para los que tienen otras cosas mejores a las que dedicar el tiempo, el informe ayuda permitiendo tres niveles de intensidad de lectura. Un primer extracto resumen muy, muy condensado que reproduzco íntegro a continuación:

La desigualdad económica crece rápidamente en la mayoría de los países. La riqueza mundial está dividida en dos: casi la mitad está en manos del 1% más rico de la población, y la otra mitad se reparte entre el 99% restante. El Foro Económico Mundial considera que esta desigualdad supone un grave riesgo para el progreso de la humanidad. La desigualdad económica extrema y el secuestro de los procesos democráticos por parte de las élites son demasiado a menudo interdependientes. La falta de control en las instituciones políticas produce su debilitamiento, y los gobiernos sirven abrumadoramente a las élites económicas en detrimento de la ciudadanía de a pie. La desigualdad extrema no es inevitable, y puede y debe revertirse lo antes posible”.

Después ofrece un segundo nivel de dedicación que consiste en un resumen ejecutivo muy completo y contundente, para, a continuación, pasar al cuerpo principal del informe en el que se entra en una dinámica de datos sobre desigualdad, injusticias, malas prácticas democráticas, cuando no secuestros puros y duros de la democracia, servidumbre de la clase política a las élites y puesta de manifiesto de la facilidad con que los que tienen mucho pueden seguir esquilmando sistemáticamente a los que tienen mucho menos hasta convertirlos en los que no tienen nada. Las cifras son impactantes y de difícil digestión si te preocupa algo más que tu propio ombligo.

El informe contiene una especie de anexo para la situación de España que no tiene desperdicio y que podéis también descargar en el mismo enlace. Inteligente, directo, claro y concluyente de la realidad española, para la que me reservo un próximo espacio, continuación de éste.

Pero, si la palabra antisistema todavía te despierta un tufo izquierdista emanado desde los arcanos de la historia reciente, que te produce un rechazo instintivo, nada más lejos. Te acompaño una cita de todo un Presidente de los Estados Unidos: Franklin Delano Roosevelt, el del crack del 29, el del “New Deal” y el de la guerra contra el nazismo, que da fuerza y soporte a las conclusiones del informe:

 El Gobierno más libre del mundo, si existiese, dejaría de ser aceptable si sus leyes tendiesen a generar una rápida acumulación de la propiedad en pocas manos, haciendo que la inmensa mayoría de la población fuese dependiente y sin recursos”

 ¿Te suena?.

 


viernes, 31 de octubre de 2014

Teorema de Torrijos: "según son los padres, así son los hijos"

La imputación delictiva de Olegué Pujol, que se añade a la de sus padres y dos de sus hermanos, va despixelando la fotografía de la familia catalana más ilustre desde Fernando el Católico hasta nuestros días. Pero junto a ellos, conectados por el vínculo familiar directo, la manta va destapando a una multitud de empresarios catalanes de todo tipo que amenaza con propagarse como un rápido virus a una parte substancial del empresariado catalán vinculado a CiU (¿hay alguno fuera?), y cuyos confines no se vislumbran aún. Todo ello y lo que sigue dicho bajo el paraguas de una estricta presunción.

No tengo más información que aportar que la que está en los medios, ni tampoco pretendo arremeter contra Catalunya a través de su “ex molt honorable”, pero me gustaría insistir con mi propia voz en un, más que punto débil, auténtico socavón de nuestra sociedad que se resquebraja y ahonda más aún cuando se destapa un escándalo de corrupción de tal calibre.

La corrupción es un auténtico cáncer y un cáncer mata, y no lentamente. Las células enfermas crecen, se reproducen y se alimentan de las células sanas, las invaden y destruyen hasta que el organismo colapsa y muere por devastación. Desgraciadamente es un ejemplo demasiado bueno del impacto de la corrupción política y económica en cualquier organismo social.

Cuando el corrupto “levanta la pasta” de verdad que lo de menos es el esquilmado económico que provoca, lo más importante, sin duda, es que una gran parte de la población pierde la fe y la esperanza en el sistema de valores, en el corpus político, en el futuro del colectivo humano, y entonces se empequeñece, su alma se empobrece y, en mayor o menor medida, se corrompe también, cayendo víctima de una peligrosa enfermedad tan mal conocida y valorada como extendida, el relativismo moral. Cunde entonces el desánimo vital, la negatividad y el pesimismo, se pierde la capacidad de juicio y el interés por progresar y mejorar, se ponen en duda los principales valores que sostienen todo este complejo entramado social, y la puntilla a este proceso de empequeñecimiento y pérdida la da tener que ver y aguantar como el corrupto, lejos de avergonzarse y pedir perdón (no digamos ya de devolver el dinero), se revuelve con furia y ataca con una descarada soberbia, con mentiras reiteradas, con negaciones que ofenden a la inteligencia, con justificaciones imposibles y se retira del estrado del parlamento autonómico irritado e internamente cargado de “sus” razones, a seguir contando y recalculando en sus escondrijos fiscales el fruto de una rapiña de la que se cree merecedor y que nunca se podrá gastar porque no es posible.

Lo malo es que el cáncer se extiende y se propaga, y la herencia del abuelo Florensi, al que nadie ha investigado aún, es un tronco que da muchas y torcidas ramas de una especie venenosa, gracias a una cuidada educación burguesa y conservadora, arropada por una bandera a la que humillan y ofenden.

Pero lo malo del Tsunami de la corrupción en este país, es que tras una gran ola rugiente llega otra, puntual e indefectible, y, las más de las veces, más estruendosa que la anterior, que hacen que la vida de estas reflexiones sea tan efímera como el mismísimo erario público.

Ya lo dicen los ancianos sabios de Torrijos (localidad de la provincia de Toledo): “según son los padres así son los hijos”.

miércoles, 22 de octubre de 2014

Joseph Pérez, premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales, contra la Leyenda Negra española


 
Quiero sumar mi humilde homenaje personal y expresar mi agradecido reconocimiento a Joseph Pérez, el historiador e hispanista francés que ha sido merecidamente galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de las Ciencias Sociales de este año 2014.

Francés de nacimiento y español de linaje, Joseph Pérez es uno de los principales expertos en el siglo XVI español, el siglo del nacimiento y consolidación del Imperio Ibérico. Ligado en su trayectoria profesional a la Universidad de Burdeos, de la que llegó a ser rector de 1978 a 1983, uno de los aspectos de sus estudios que más me han impactado desde que le sigo y que me han llevado a este reconocimiento y agradecimiento es el análisis y la contribución al desmentido que hace de la Leyenda Negra española.

Esta Leyenda Negra española es solo una parte, la parte inicial y el ariete principal de lo que con el tiempo se fue convirtiendo en una vasta operación ideológica de los países anglosajones y protestantes europeos en contra de los países latinos y católicos, la cual no pasaría de ser un hecho histórico más si no fuese porque aún mantiene una gran parte de su vigencia en el conjunto de las ideas y los sentimientos que subyacen en la base del pensamiento europeo y la consideración sobre sí mismos y sus relaciones mutuas de los distintos pueblos que integran la Unión Europea, y que son un obstáculo, una rémora y un perjuicio para la unión progresiva e igualitaria de los individuos y las naciones.

Esta vasta operación ideológica descansa sobre tres pilares o ideas básicas:

·         La primera es fruto del pacto no escrito entre las naciones europeas ante el ascenso y la supremacía política de España y su Imperio, bajo el principio de “todo lo que perjudique al Imperio Español, nos beneficia” y consiste de dibujar con insistencia la imagen de los españoles como salvajes, crueles, déspotas, asesinos, incultos y groseros, y en especial de su Rey Felipe II ante el hecho, muy mal estudiado y valorado, de la muerte de su primogénito el infante Carlos. Se trataría de la primera gran operación de marketing de imagen de la historia.

·         La segunda, que no es exclusivamente española, critica a los países del catolicismo romano y se resume con la idea y la imagen de que, en palabras del propio Joseph Pérez, “los países del Norte son los progresistas, los que cuidan la ciencia y los tolerantes”,

·         El tercer elemento de esta operación ideológica, aún más oscura y que roza el racismo, se sustenta en la idea de que “la civilización es cosa de la raza germánica y anglosajona”.

Repito que todo lo anterior sería no más que materia de estudiosos de la historia sino fuera por su actual pervivencia y vigencia en el ámbito del continente europeo y de la ideología dominante mundial, que para unos se traduce en la idea, más o menos maquillada y edulcorada de su superioridad moral, tecnológica y civilizacional, y para otros, donde incluyo la generalidad de los españoles, en una falta de autoestima y un complejo de inferioridad que constituye una de las principales rémoras del progreso de España, y de las que solo recientemente y aun ritmo demasiado lento nos empezamos a desprender.

En resumen y como gran frase titular: Los españoles nos hemos creído La Leyenda Negra sobre nosotros y, en gran medida, aún nos la seguimos creyendo. No se puede dejar de reconocer el éxito de la operación ideológica anglosajona. Pero lo importante aquí y ahora, y el objeto de este escrito, es el reconocimiento para Joseph Pérez que ha contribuido definitivamente, con seriedad y rigor históricos, a dinamitar los principios y bases de esta Leyenda, esperemos que para siempre. Los españoles se lo agradecemos con el premio Príncipe de Asturias.

jueves, 23 de enero de 2014


"Caras Nuevas"


No es que yo confíe en el Partido Socialista (demos lo de Obrero y Español por perdido) para guiar esta nave-país en el futuro, pero el anuncio de Rubalcaba, aunque sea con el brazo torcido tras la espalda, de convocatoria de primarias para final de este año 2014 (largo me lo fiáis) es la primera noticia en bastantes años que indica que puede haber "caras nuevas" en la política española de primera fila. Necesitamos una jubilación de esta actual "casta" política, que hunde sus raíces en los tiempos de la degradación de la democracia con Felipe González, y que tanto daño nos ha hecho, y tiene intención de seguirnos haciendo, a poco que se pueda, como sea, mantener en el poder.

Rubalcaba puede hacernos el favor completo, en un último alarde de generosidad, reconocer que está políticamente agotado y gastado, y no presentarse a esas primarias; dejar espacio a toda esa pléyade de caras nuevas o semi nuevas, que podrían dar un paso adelante y airear la trastienda del poder antes de que éste acabe con todos nosotros.

Está claro que el sistema incluye en sus cimientos el ADN de la autoperpetuación con formas nuevas, pero depende ya algo más de todos nosotros vigilar y corregir a los líderes futuros en su trayectoria política, y no dejar que adopten los viejos y consentidos vicios del poder. Sea así

 

domingo, 7 de octubre de 2012

RAJOY: Guiños de dictador



Pasé por alto sus comentarios sobre las bondades de la “gente que no se manifiesta”, “que no abre los telediarios y las portadas de los periódicos internacionales”, tras las protestas y altercados con las fuerzas de seguridad en las manifestaciones populares del 25S, Al fin y al cabo no pasa de ser uno más de sus muchos exabruptos, y de sus arranques de ira cuando la gente le lleva la contraria y se le levanta harta ya de este expolio continuado.  

A él le gusta más que el rebaño se quede bien quieto mientras se le esquila. No se puede esquilar bien y a gusto a una oveja nerviosa, inquieta y agitada. No rinde tanta lana. Nos prefiere así, aborregados, que ya lo estamos, y dopados por los obsesivos y soporíferos mantrams del déficit y toda su metralla conceptual asociada.
 
Pero cuando le escuché anoche, en un mitin preelectoral al PP gallego, decir exactamente: “Galicia necesita una mano firme en el timón, no cuatro o cinco manos arrebatándose el timón unas a otras”, el pufo a dictador que expelían sus palabras me hizo cambiar de canal inmediatamente. Me recordó a Franco (no hace falta ir más lejos) y su Movimiento, tan cansinos con su Orden Público (dicho de otra forma, “aquí no se mueve ni Dios”) y con la Nave Hispánica guiada con mano firme por el Caudillo, su amado timonel, enfilando la proa hacia el futuro, como consignas para la apertura del NO-DO.
 
Acostumbrado a decir lo que le viene en gana, o a no decir nada cuando le viene en gana, mientras su selecto rebaño partidario todo lo asiente moviendo la cabeza mecánicamente como aquellos perritos de la luna trasera del Seat 600, a Rajoy se le escapan los guiños de moderno dictador que todo PePero lleva dentro. Porque la docilidad extrema de un pueblo como valor a exaltar públicamente y el timón de la nave bajo un brazo fuerte, dicho ante las cámaras de todas las televisiones del país, nos habla de un dictador frustrado cuya ideología política interior es, lisa y llanamente, la dictadura.
 
Lo que me quita el sueño, lo que lleva a darme cabezazos contra la pared, es que le ha votado el pueblo, por mayoría absoluta, para que no haya dudas, y en libertad, haciendo bueno una vez más el concepto “Vota y calla”, tan anhelado por los políticos.
 
En este contexto de erosión sutil pero sistemática de derechos y libertades de la sociedad, a la que la crisis está sirviendo como un acelerador poderoso, hay que entender una idea sencilla: Las fuerzas sociales no son estáticas, son muy dinámicas, más de lo que parece. Unas empujan hacia un mundo de libertades, derechos, deberes y justicia; otras hacia un mundo de castas, liderazgos personales, negocios sucios, pelotazos, nepotismo, silencios masivos y apropiación indebida del excedente económico, público y privado. Son como dos manos enfrentadas por las palmas que empujan una frente a la otra; llegan un equilibrio de fuerzas y, desde una perspectiva exterior, parece que están quietas, pero la fuerza está ahí, empujando siempre. Cuando una pierde fuerza, resta fuelle y empuje, la otra le gana terreno y le hace retroceder. Así de simple. En el caso de España, el pueblo se fue a echar la siesta, adormilado por los vapores del fuego fatuo de la burbuja inmobiliaria y otras y cedió en su fuerza. La otra fuerza, que nunca descansa, le ha comido el terreno. Ahora habrá que hacer mucha más fuerza para recuperarlo, si es que logramos despertar de esa siesta.